Una de las especies más grandes de ciervos en el planeta Tierra, el ciervo rojo es nativo y común en muchas regiones de Europa y Asia. El ciervo rojo es extremadamente adaptable, y debido a esto se ha introducido con éxito en Australia, Nueva Zelanda y las Américas.
El ciervo no solo es una de las especies de ciervos más ampliamente distribuidas, sino que tiene una veintena de subespecies a su nombre. Aunque un puñado de las subespecies están clasificadas como vulnerables o en peligro de extinción, la mayoría de ellas han sido clasificadas como animales de menor preocupación por la UICN. He aquí un dato interesante: los ciervos rojos solo tienen sus hermosos abrigos rojos durante los meses más cálidos, porque durante el invierno cultivan más abrigos con un color predominantemente gris.